Una suma de 2,228 millones 218 mil 26 pesos es lo que el Gobierno del Estado de Quirino Ordaz Coppel gastó en seis obras como estadios, parques y en la compra edificios sin contar con la autorización presupuestal en Ley de Ingresos y Presupuesto de Egresos.

En el análisis de la Cuenta Pública del Poder Ejecutivo del año 2018 que hoy fue rechazada por el Congreso del Estado, se detectaron 6 grandes obras que se realizaron en el estado de Sinaloa y que no fueron autorizadas ni presupuestadas en la Ley de Ingresos y Presupuesto de Egresos.

Se trata de la remodelación del Estadio «Teodoro Mariscal», en Mazatlán, donde el Gobierno del Estado «invirtió» 402 millones de pesos.

Otra obra no presupuestada fue la remodelación del estadio Emilio Ibarra, en Los Mochis, con un gasto de 400 millones de pesos; la remodelación estadio de los Dorados, en Culiacán, con un gasto de 58 millones 218 mil 26 pesos.

La obra más costosa que se realizó fue la construcción del estadio de futbol en Mazatlán, con 652 millones de pesos, además de la construcción del Parque Central Mazatlán, con un gasto de 208 millones de pesos.

Sin estar presupuestado, el Gobierno de Quirino Ordaz gastó 508 millones de pesos en la compra y remodelación edificio Homex, en Culiacán.

La Comisión de Fiscalización del Congreso rechazó la Cuenta Pública de Quirino Ordaz y cuestionó el gasto discrecional que se hizo de estos recursos.