José Noriel Portillo Gil (a) “El Chueco”, presunto criminal acusado de asesinar a dos sacerdotes jesuitas y a un guía de turistas en Cerocahui, Chihuahua, en junio de 2022, fue encontrado ejecutado de 9 balazos el pasado fin de semana en el municipio de Choix, Sinaloa.

Aunque los familiares del presunto gavillero y homicida acudieron ante las autoridades ministeriales a reclamar su cuerpo, las Fiscalías de Sinaloa y de Chihuahua trabajan en la identificación oficial y legal de “El Chueco”, ya que éste cuenta con varias órdenes de aprehensión y se tiene que cumplir con la formalidad legal y ministerial del caso.

Por ello, la Fiscalía General del Estado de Sinaloa y Chihuahua trabajan en análisis forenses para determinar si el cuerpo encontrado en la sierra de Choix el pasado sábado 18 de marzo es el de José Noriel Portillo Gil, “El Chueco”.

El pasado sábado 18 de marzo, las autoridades de Sinaloa encontraron el cuerpo de un hombre asesinado de 9 balazos, uno de ellos en la frente, a orillas de un camino de terracería que conduce a la comunidad de Los Picachos, Choix, en los límites de Sinaloa y Chihuahua.

La víctima vestía vestimenta táctica de camuflaje y chaleco portacargadores, pero no portaba ninguna identificación, por lo que el cadáver fue trasladado a una funeraria de Los Mochis, Sinaloa.

Desde el martes 21 de marzo trascendió que dicho cadáver correspondería al de “El Chueco”, ya que los rasgos fisonómicos del rostro tenían similitud a Portillo Gil, además de que presuntos familiares acudieron a reclamar sus restos bajo el nombre de José Noriel Portillo.

Aunque la Fiscalía informó que de manera oficial no hay una confirmación, personal de su homóloga en Chihuahua se ha movilizado a Sinaloa para realizar las periciales necesarias en colaboración con la sinaloense para realizar pruebas de ADN con los familiares y confirmar ministerialmente la identidad del presunto criminal.

Portillo Gil es acusado del crimen de los sacerdotes jesuitas Javier Campos Morales y Joaquín Mora Salazar, en la comunidad de Cerocahui, Chihuahua, así como del guía de turistas Pedro Palma Gutiérrez, asesinados el 20 de junio de 2022, al interior de la parroquia de San Francisco Javier, ubicada en la comunidad de Cerocahui, en el municipio chihuahuense de Urique.

“El Chueco” -por quien las autoridades pedían una recompensa de 5 millones de pesos y era buscado desde hace 9 meses por los crímenes cometidos el 20 de junio de 2022- era considerado uno de los principales generadores de violencia en la Sierra Tarahumara desde hace 5 años, y se le identificaba como operador del grupo denominado Gente Nueva, del Cártel de Sinaloa.

También contaba con otra orden de aprehensión en su contra por el homicidio del turista estadounidense Patrick Braxton Andrew, cometido en 2019, tras confundirlo con un agente de la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés).

Igualmente se le vinculaba con el asesinato del joven beisbolista Paul Osvaldo Berrelleza Rábago, crimen que presuntamente cometió el mismo día que mató a los dos sacerdotes jesuitas, el 20 de junio de 2022.